Imagínese lo que guste con este cuento corto:
LA ESCULTURA ERÓTICA
La
escultura era tremendamente erótica que, cuando el artista la terminó, no
aguantó las ganas y le hizo el amor.
martes, 29 de abril de 2014
lunes, 28 de abril de 2014
¿Te gustan las mascotas?
Este cuento corto cobro forma después de contabilizar el número de perros atropellados en la carretera durante un par de semanas.
A petición de una amiga dejé de contar los perros muertos, porque le pareció de mal gusto.
A manera de colofón de esa contabilidad de la muerte, se me ocurrió este cuento corto, después de contemplar uno de los últimos perros atropellados:
GANAS DE VIVIR
El perro atropellado tenía tantas
ganas de vivir, que se levantó en puro pellejo de la carretera y se alejó
moviendo la cola.
lunes, 21 de abril de 2014
Uno de tiburones
Hay mucha gente en la playa.
Un nadador ha sido más audaz y se ha alejado de la playa, mar adentro, donde encuentra una boya que porta un letrero que dice "Prohibido nadar aquí".
El nadador mira a su alrededor, hay un sol radiante, a lo lejos se ven las personas en la playa como palitos de colores sobre la arena.Sonríe con ironía, está seguro de sí mismo, piensa que los lugareños son muy mogigatos por ese tipo de letreros y aprovecha para zambullirse.
A pesar del sol inclemente hay escasa visibilidad bajo aquellas aguas---en eso se parece a la neblina, a veces permite ver algo o a veces nada---. Los rayos de sol que penetran el agua permiten apreciar una especie de cortinas de agua, como cubos de cristal enormes. Los sonidos bajo el agua se escuchan secos y más intensos.
El nadador quiere romper su récord de aguantar la respiración bajo el agua. Asciende a la superficie, el sol le lastima la vista, aspira aire y con fuerza se vuelve a sumergir.
Por el rabillo del ojo le pareció ver una sombra, como si se tratara de un objeto o de otro nadador, pero no ve nada. Piensa que es su imaginación y se pone un poco nervioso. Con cautela busca por todos lados bajo el agua y le parece que una sombra se aleja de manera furtiva. La incertidumbre y el instinto de sobrevivencia lo llevan de regreso a la superficie.
Mira a su alrededor temiendo encontrarse con algo desagradable. No cuentra nada. Respira profundo y piensa que es su imaginación que lo está poniendo nervioso. Está indeciso entre darse otra zambullida o regresar a la playa.
El mar se ve inconmensurable y peligroso.
Ubica la playa y empieza a nadar en esa dirección cuando a sus espaldas se escucha un ruido como si algo hubiese caído al agua, salpicándole y generando orlas de blanca espuma a su alrededor. Voltea y alcanza a ver una sombra que se aleja, como un enorme pez, mientras siente en las piernas un ardor sumamente doloroso acompañado de un calor creciente, como si tuviera las dos piernas metidas en agua muy caliente.
Las aguas a su alrededor se empiezan a teñir de rojo, es sangre.
El nadador quiere volar sobre la superficie del agua y nada en dirección a la playa, pero no avanza. Grita, mueve los brazos en señal de auxilio. La gente está muy lejos y no alcanza a escuchar. Un niño lo ve a lo lejos y le comunica algo a una bañista de lentes oscuros. La bañista mira en dirección del nadador, tarda un poco en ubicarlo. El hombre que está en el agua ensangretada levanta los brazos y su garganta no le responde cuando quiere gritar. La bañista lo ve y da aviso al salvavidas.
Una lancha de motor sale inmediatamente a su encuentro, cuando llegan cerca del nadador, éste pierde el sentido. Lo sacan del agua, pero el nadador ya no tiene sus extremidades: el tiburón se había llevado sus piernas.
Todo lo anterior, lo podemos representar en el siguiente cuento corto:
Cuando sintió el ardor, el tiburón ya había huido
con sus piernas.
Un nadador ha sido más audaz y se ha alejado de la playa, mar adentro, donde encuentra una boya que porta un letrero que dice "Prohibido nadar aquí".
El nadador mira a su alrededor, hay un sol radiante, a lo lejos se ven las personas en la playa como palitos de colores sobre la arena.Sonríe con ironía, está seguro de sí mismo, piensa que los lugareños son muy mogigatos por ese tipo de letreros y aprovecha para zambullirse.
A pesar del sol inclemente hay escasa visibilidad bajo aquellas aguas---en eso se parece a la neblina, a veces permite ver algo o a veces nada---. Los rayos de sol que penetran el agua permiten apreciar una especie de cortinas de agua, como cubos de cristal enormes. Los sonidos bajo el agua se escuchan secos y más intensos.
El nadador quiere romper su récord de aguantar la respiración bajo el agua. Asciende a la superficie, el sol le lastima la vista, aspira aire y con fuerza se vuelve a sumergir.
Por el rabillo del ojo le pareció ver una sombra, como si se tratara de un objeto o de otro nadador, pero no ve nada. Piensa que es su imaginación y se pone un poco nervioso. Con cautela busca por todos lados bajo el agua y le parece que una sombra se aleja de manera furtiva. La incertidumbre y el instinto de sobrevivencia lo llevan de regreso a la superficie.
Mira a su alrededor temiendo encontrarse con algo desagradable. No cuentra nada. Respira profundo y piensa que es su imaginación que lo está poniendo nervioso. Está indeciso entre darse otra zambullida o regresar a la playa.
El mar se ve inconmensurable y peligroso.
Ubica la playa y empieza a nadar en esa dirección cuando a sus espaldas se escucha un ruido como si algo hubiese caído al agua, salpicándole y generando orlas de blanca espuma a su alrededor. Voltea y alcanza a ver una sombra que se aleja, como un enorme pez, mientras siente en las piernas un ardor sumamente doloroso acompañado de un calor creciente, como si tuviera las dos piernas metidas en agua muy caliente.
Las aguas a su alrededor se empiezan a teñir de rojo, es sangre.
El nadador quiere volar sobre la superficie del agua y nada en dirección a la playa, pero no avanza. Grita, mueve los brazos en señal de auxilio. La gente está muy lejos y no alcanza a escuchar. Un niño lo ve a lo lejos y le comunica algo a una bañista de lentes oscuros. La bañista mira en dirección del nadador, tarda un poco en ubicarlo. El hombre que está en el agua ensangretada levanta los brazos y su garganta no le responde cuando quiere gritar. La bañista lo ve y da aviso al salvavidas.
Una lancha de motor sale inmediatamente a su encuentro, cuando llegan cerca del nadador, éste pierde el sentido. Lo sacan del agua, pero el nadador ya no tiene sus extremidades: el tiburón se había llevado sus piernas.
Todo lo anterior, lo podemos representar en el siguiente cuento corto:
EL TIBURÓN
miércoles, 16 de abril de 2014
La orden del moribundo
Es más común de lo que parece.
Con bastante frecuencia se conocen casos en los que el moribundo pidió que tras su muerte se procediera a la quema de su diario personal o sus escritos, orden que cuando no ha sido respetada, ha permitido disfrutar de grandes obras literarias o conocer documentos de gran valor.
Este día, 16 de abril, publica el periódico El Pais, que el Papa Juan Pablo II ordenó a su secretario que quemara sus escritos, instrucción que evidentemente no realizó.
Tal vez esos escritos no tengan un gran valor literario, pero la gente que admira a Juan Pablo II podría hacer de esa publicación un éxito de ventas.
(Foto tomada de: http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/04/15/actualidad/1397578789_396763.html)
Un cuento corto sobre esta prática podría abordar la idea de que la persona que recibe la instrucción del moribundo, lee los materiales escritos y le parecen tan fascinantes que los publica bajo su propio nombre, teniendo un gran éxito editorial.
Este cuento podría quedar así:
Claro, este se me acaba de ocurrir y ya lo subí al twitter, pero de hecho, ya tenía uno semejante que había escrito con anterioridad que se refiere al momento en que la persona que recibe la instrucción la cumple al pie de la letra:
Moribundo ordenó a su mejor amigo
quemar sus geniales apuntes, cosa que ni tardo ni perezoso éste cumplió al pie
de la letra.
Con bastante frecuencia se conocen casos en los que el moribundo pidió que tras su muerte se procediera a la quema de su diario personal o sus escritos, orden que cuando no ha sido respetada, ha permitido disfrutar de grandes obras literarias o conocer documentos de gran valor.
Este día, 16 de abril, publica el periódico El Pais, que el Papa Juan Pablo II ordenó a su secretario que quemara sus escritos, instrucción que evidentemente no realizó.
Tal vez esos escritos no tengan un gran valor literario, pero la gente que admira a Juan Pablo II podría hacer de esa publicación un éxito de ventas.
(Foto tomada de: http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/04/15/actualidad/1397578789_396763.html)
Un cuento corto sobre esta prática podría abordar la idea de que la persona que recibe la instrucción del moribundo, lee los materiales escritos y le parecen tan fascinantes que los publica bajo su propio nombre, teniendo un gran éxito editorial.
Este cuento podría quedar así:
EL GRAN LEGADO
El moribundo ordenó a su secretario quemar sus escritos, pero éste los
publicó bajo su propio nombre, logrando un gran éxito editorial.
Claro, este se me acaba de ocurrir y ya lo subí al twitter, pero de hecho, ya tenía uno semejante que había escrito con anterioridad que se refiere al momento en que la persona que recibe la instrucción la cumple al pie de la letra:
AL PIE DE LA LETRA
martes, 15 de abril de 2014
Aladino y la Lámpara Maravillosa
Coincido plenamente.
Para facilitar la escritura de cuentos cortos que tengan ese ímpetu de síntesis y análisis condensado, es necesario leer y reeleer.
Un buen princio podría ser Las Mil y Una Noches, que viene a ser algo así como la mamuschka de los cuentos, pero con dimensiones infinitas.
Es un libro maravilloso.
Ahora mismo recuerdo la historia de Aladino y la Lámpara Maravillosa.
(Ilustración tomada de: https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjbwQ9UzbFIFfo9FlPodUG4VA04optoU38fUT3YCqoE6YxY6BlY4RFCnT7_wtF9nx6i7hBRrEA_DvNK7Iepat0WFSIRCrdw5PlefRvoXxKpoYoLP87icjcbbfBYUCnUDVnQis5AI24R54Q/s1600/Sebastian+Escobar+-+Aladino+Y+La+L%C3%A1mpara+Maravillosa.jpg)
¿Por qué no intentamos un cuento corto con esa leyenda?
Según la historia, Aladino es una persona pobre que encuentra la Lámpara Maravillosa que al frotarla, le sale de su interior un genio que compensa en lo que le soliciten, sobre todo por el agradecimiento de haberlo salvado de su encierro.
Procesando el cuento corto: ¿y que tal si le cambiamos el final, digamos que el genio no quería salir de la lámpara?
Listo. A subirlo en twitter.
Para facilitar la escritura de cuentos cortos que tengan ese ímpetu de síntesis y análisis condensado, es necesario leer y reeleer.
Un buen princio podría ser Las Mil y Una Noches, que viene a ser algo así como la mamuschka de los cuentos, pero con dimensiones infinitas.
Es un libro maravilloso.
Ahora mismo recuerdo la historia de Aladino y la Lámpara Maravillosa.
(Ilustración tomada de: https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjbwQ9UzbFIFfo9FlPodUG4VA04optoU38fUT3YCqoE6YxY6BlY4RFCnT7_wtF9nx6i7hBRrEA_DvNK7Iepat0WFSIRCrdw5PlefRvoXxKpoYoLP87icjcbbfBYUCnUDVnQis5AI24R54Q/s1600/Sebastian+Escobar+-+Aladino+Y+La+L%C3%A1mpara+Maravillosa.jpg)
¿Por qué no intentamos un cuento corto con esa leyenda?
Según la historia, Aladino es una persona pobre que encuentra la Lámpara Maravillosa que al frotarla, le sale de su interior un genio que compensa en lo que le soliciten, sobre todo por el agradecimiento de haberlo salvado de su encierro.
Procesando el cuento corto: ¿y que tal si le cambiamos el final, digamos que el genio no quería salir de la lámpara?
ALADINO Y LA LAMPARA MARAVILLOSA
Molesto por haberlo despertado de su milenario sueño en la Lámpara maravillosa, el Genio convirtió en polvo a Aladino.
Listo. A subirlo en twitter.
lunes, 14 de abril de 2014
Violencia de género
Es un chispazo.
La mayoría de las personas hacen cuentos cortos, en forma de ideas o reflexiones.
Si no se toma nota al instante, lo más probable es que se pierda esa idea irremediablemente.
En muchas ocasiones he lamentado no escribir al momento algunas buenas ideas para un cuento corto.
A veces se presenta como una pieza acabada sin necesidad de trabajarla, pero las circunstancias no favorecen que se pueda escribir al momento y luego se pierde.
Hay ocasiones en que el cuento corto se crea a partir de una noticia, una imagen o alguna referencia mínima a partir de la cual surge la composición con un poco de malicia.
Recuerdo por ejemplo haber leído la noticia de que en China habían rescatado del mar un cuerpo que flotaba y que resultó ser una muñeca inflable.
He ahí el motivo para escribir: una muñeca inflable.
¿Quién podría deshacerse de esa manera de una muñeca inflable, una esposa celosa, un adolescente sorprendido en alguna travesura o un maníatico?
La idea da para mucho y se podría vincular, por ejemplo, al problema de la violencia. De esta manera resultó el siguiente cuento corto:
VIOLENCIA DE GÉNERO
Después de abusar de ella la golpeó salvajemente, pero ella explotó, por su condición de muñeca inflable.
martes, 8 de abril de 2014
Gravity en un cuento corto
Es posible.
Pasaran muchos años, sin duda, en que se siga hablando de la galardonada película estadunidense "Gravity".
Independientemente de las críticas, esa película tiene una economía de personajes y de diálogos que mantienen al espectador colgado del asiento.
Tiene una trama muy sencilla con unos efectos extraordinarios.
Básicamente, la película trata de una astrounauta que sobrevive a una terrible destrucción en el espacio y después de muchas peripecias logra regresar a la tierra. Cómo podemos sintetizar esto en un cuento corto?
¿Cómo se podría hacer un cuento corto de una película? Aquí va.
Pasaran muchos años, sin duda, en que se siga hablando de la galardonada película estadunidense "Gravity".
Independientemente de las críticas, esa película tiene una economía de personajes y de diálogos que mantienen al espectador colgado del asiento.
Tiene una trama muy sencilla con unos efectos extraordinarios.
Básicamente, la película trata de una astrounauta que sobrevive a una terrible destrucción en el espacio y después de muchas peripecias logra regresar a la tierra. Cómo podemos sintetizar esto en un cuento corto?
¿Cómo se podría hacer un cuento corto de una película? Aquí va.
GRAVITY EN UN CUENTO CORTO
Cuando la astronauta perdida en el espacio abrió los ojos, ya estaba sana y salva en La Tierra.
lunes, 7 de abril de 2014
La sombra del líder
El otro día escuchaba las noticias.
De manera reiterada, la información principal se refería a un político que había roto con algunos de sus colaborades de confianza y venía dando tumbos en la escena política como un borracho recién salido de una fiesta de fin de semana.
La prensa, con razón o no, presentaban al político como un hombre sumamente inseguro y él daba motivos alos medios para que lo trataran de ese modo.
En ese momento, parecía un hombre que no confiaba ni en su sombra.
Y aunque podía inspirar varios cuentos, parece que éste es el más acertado:
De manera reiterada, la información principal se refería a un político que había roto con algunos de sus colaborades de confianza y venía dando tumbos en la escena política como un borracho recién salido de una fiesta de fin de semana.
La prensa, con razón o no, presentaban al político como un hombre sumamente inseguro y él daba motivos alos medios para que lo trataran de ese modo.
En ese momento, parecía un hombre que no confiaba ni en su sombra.
Y aunque podía inspirar varios cuentos, parece que éste es el más acertado:
LA SOMBRA DEL LÍDER
El líder tenía
una obsesión enfermiza por la traición y sospechaba de todos, de modo que le
puso una bomba a su propia sombra.
viernes, 4 de abril de 2014
El Diario del Capitán del Titanic
Es un frase de doble sentido.
En la cultura popular "La puntita nomás" es de doble sentido y tiene connotaciones sexuales.
Pero, y qué tiene que ver esto con el Titanic.
(Imagen tomada dehttps://wealthcop.com/the-myth-of-beating-the-market/)
¡Je, je! ¡Exacto!, con esta imagen ya casi está explicado todo. Ahora únicamente hace falta convertirla en un cuento corto, de modo que nos resultó algo así como:
En la cultura popular "La puntita nomás" es de doble sentido y tiene connotaciones sexuales.
Pero, y qué tiene que ver esto con el Titanic.
(Imagen tomada dehttps://wealthcop.com/the-myth-of-beating-the-market/)
¡Je, je! ¡Exacto!, con esta imagen ya casi está explicado todo. Ahora únicamente hace falta convertirla en un cuento corto, de modo que nos resultó algo así como:
EL DIARIO DEL CAPITAN DEL TITANIC
La última frase que escribió en su diario el Capitán del Titánic decía: "¡Ay, Dios, la puntita nomás!"
jueves, 3 de abril de 2014
El violín de Paganini
Es una ironía.
Tuve conocimiento de Paganini, el gran violinista italiano, por un taller de artes plásticas, en la niñez.
La joven y agraciada maestra del taller tenía un trabajo de artes plásticas en el que se veía a un violinista extremadamente delgado con un rostro exaltado y tocando su violín en una posición que simulaba un dragón a punto de atacar. Al preguntarle sobre la figura dijo que se trataba de un violinista italiano muy virtuoso del que decían que le ponía como cuerdas de su violín las tripas de mujeres.
(imagen tomada de http://www.musicweb-international.com/classrev/2003/Nov03/Lehar_Paganini.jpg)
Así que con una disculpa al gran Paganini, aquí develamos el misterio de las cuerdas de su violín.
¿Qué ocurre cuando discutes con tu mujer y de pronto te acuerdas de Paganini? He aquí el resultado, en un cuento corto:
Cuando Paganini le puso las tripas de su mujer como cuerdas de su violín, su música se hizo de puros reproches.
Tuve conocimiento de Paganini, el gran violinista italiano, por un taller de artes plásticas, en la niñez.
La joven y agraciada maestra del taller tenía un trabajo de artes plásticas en el que se veía a un violinista extremadamente delgado con un rostro exaltado y tocando su violín en una posición que simulaba un dragón a punto de atacar. Al preguntarle sobre la figura dijo que se trataba de un violinista italiano muy virtuoso del que decían que le ponía como cuerdas de su violín las tripas de mujeres.
(imagen tomada de http://www.musicweb-international.com/classrev/2003/Nov03/Lehar_Paganini.jpg)
Así que con una disculpa al gran Paganini, aquí develamos el misterio de las cuerdas de su violín.
¿Qué ocurre cuando discutes con tu mujer y de pronto te acuerdas de Paganini? He aquí el resultado, en un cuento corto:
EL VIOLÍN DE PAGANINI
Cuando Paganini le puso las tripas de su mujer como cuerdas de su violín, su música se hizo de puros reproches.
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