viernes, 9 de enero de 2015

Cinco cuentos cortos de García Márquez

Hay dos cosas interesantes:

Algunos artículos, reportajes y novelas de García Márquez tienen títulos que son un cuento corto en sí mismo, y que será tema otra colaboración.

Además de la gran capacidad de síntesis que tenía el buen Gabo para titular sus trabajos, en diversos escritos se encuentran cuentos cortos.

Aquí unos ejemplos tomados de "Textos Costeños", obra periodística, compilada por Jacques Gilard. Volumen II. Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1987.


  • Un día salía a hacer una diligencia urgente. Ya en la calle alguien me dijo: ¿A qué tanta prisa?" Volví a mirar y era yo mismo que ya venía de regreso.

  • A alguien se le ocurrió leer una novela de policía al revés, de la última página a la primera, y averiguó quién fue el asesino que descubrió la víctima que había asesinado a un detective.

  • De pronto se encuentra uno con el amigo que no veía hace mucho tiempo. "¿No te alegres de verme?", se le pregunta, "No", responde. "Alguien me dijo que habías muerto y ya me había acostumbrado a no alegrarme cuando te viera.

  • Usted camina tranquilamente por la calle cuando, a la vuelta de una esquina, se siente inmortal, vivo para siempre. Tal vez la persona que estaba soñando con usted se ha quedado muerta antes de despertar y lo ha dejado a usted sin que nadie lo sueñe; incondicionalmente vivo.

  • Un día el ventilador eléctrico empieza a girar al revés, de izquierda a derecha, y hace un calor sofocante. Abre uno la ventana y descubre que el vecino de enfrente está parado en cuatro patas, ladrando de frío.
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jueves, 1 de enero de 2015

Un libro de cuentos cortos

Realmente hay mucha literatura.

Uno de los libros que hace una selección del género se llama El Libro de la Imaginación, compilado por Edmundo Valadés y que fue editado en 1976 y reimpreso en la Biblioteca Joven del Fondo de Cultura Económica en 1984.

Acá una selección al azar de narraciones que contiene este excelente libro:

El sueño de la Virgen

Cuando dijo "sí", tendida en el pasto, descubrió que soñaba; pero era demasiado tarde.



Tomas Arauz

¿Sería fantasma?

Al caer de la tarde, dos desconocidos se encuentran en los oscuros corredores de una galería de cuadros. Con un ligero escalofrío, uno de ellos dijo:
--Este lugar es siniestro. ¿Usted cree en fantasmas?
--Yo no --respondió el otro--. ¿Y usted?
--Yo sí --dijo el primero y desapareció.

George Loring Frost: Memorabilia

Exactitud

Permitid que os refiera la historia de los automovilistas en China. ¿No la conocéis acaso? El automóvil está en panne en un pueblecito chino; tiene un agujero en el depósito. Se descubre a un artesano que no puede reparar el depósito, pero que lo copiará en dos horas. Los automovilistas parten de nuevo con un depósito magnífico. En plena noche, nuevo panne. El chino había copiado también el agujero.

Jean Cocteau

Mala suerte

Chang Tzu nos habla de un hombre tenaz que, al cabo de tres ímprobos años, dominó el arte de matar dragones y que en el resto de sus días no dio con una sola oportunidad de ejercerlo.

Jorge Luis Borges

Diógenes y el calvo

El filósofo cínico Diógenes, insultado por un hombre calvo, le replicó:
--No he de ser yo quien recurra también al insulto, ¡Dios me libre de ello! Al contrario, haré el elogio de los cabellos que han abandonado un cráneo malvado y hueco.

Esopo

Don

Un hada le había concedido el don de abrir cualquier diccionario justamente en la página donde se hallaba la palabra buscada.

Julio Torri